Hugo Chávez ha acusado desde que llegó al gobierno de Venezuela al capitalismo como un sistema generador de pobreza y esclavizar a todos los trabajadores. Pero lo que no dice es que él es el culpable de la fuga de capitales más grande e importante de la historia de su país y, si eso no fuese poco, ha provocado el aumento de la pobreza absoluta del 43 al 53 por ciento entre 1999 y 2004, y la pobreza extrema del 17 al 25 por ciento, cifras dicho sea de paso ofrecidas por el propio Gobierno. (Instituto Nacional de Estadística, República Bolivariana de Venezuela, Reporte estadístico nº 2, 2004, p.5)
El presidente de Venezuela también tiene cierta predilección por hacer largos discursos cuando puede sobre el imperialismo, las multinacionales, la globalización y etc. En la Cumbre de América Latina y la Unión Europea en mayo del 2004 celebrada en Guadalajara, México; mientras los presidentes, representantes y demás comitivas oficiales de los respectivos países se preocupaba por entablar reuniones con empresas, inversores, homólogos de otros estados para idear nuevas alianzas económicas; ¿saben a qué se dedico el revolucionario presidente venezolano? Pues “usó sus veinte minutos de tiempo en la cumbre para arremeter durante más de treinta y cinco minutos contra ustedes los ricos, señalando al ex-canciller alemán Schroeder, por ser los supuestamente responsables de la pobreza de América Latina.” Los funcionarios europeos pensaban que estaban viendo un fantasma de los años setenta y dejaron de prestar atención. Mientras las diplomacias de Estonia, Letonia, Lituania, Irlanda, Chile, Argentina, Mexico, Brasil, etc. se dedicaron a firmar acuerdos y convenios de inversión.
Sin embargo, estas actuaciones más llamativas de Hugo Chávez no son las más peligrosas. Son las llevadas a cabo en su propio país las que están levantando cierto tufillo ditactorial que algunos parece que niegan a ver. Repasemos algunas:
• en 2001 había hecho cambiar las leyes sobre la propiedad de las tierras, hidrocarburos y bancos.
• En 2002 había descabezado a la organización empresarial venezolana más importante, Fedecámara, y a al central obrera, la Confederación de Trabajadores de Venezuela, y a la compañía estatal independiente que controlaba la mayor parte del presupuesto nacional, el monopolio estatal PDVSA.
• En 2004 reformo la Corte Suprema de 20 a 32 miembros, llenándolo de partidarios y asegurándose el control total en una institución encargada de dictar la última palabra sobre la libertad de prensa y las reglas electorales. Este mismo año aprueba una ley que otorga poderes al gobierno para censurar de facto a la prensa.
Pero estas cosas no deben sorprendernos, Chávez ha dicho varias veces que quiere mantenerse en el poder hasta por lo menos el 2021, y que la democracia representativa es un sistema que “no sirve para ningún gobierno latinoamericano, porque la única cosa para la que ha servido es para dejar que una clase bastarda tome el poder y hunda al pueblo en la miseria.” (Amen)
Pero Hugo Chávez ha logrado también cosas nunca vistas, conseguir que sindicato y patronal se aliaran en una huelga para respaldar el paro nacional de los trabajadores de PVDSA, y la huelga general indefinida había logrado convocar una de las mayores manifestaciones de la historia del país. Pero por lo visto, al presidente no le debieron gustar los gritos a la puerta de su casa de Miraflores, y según confesaron algunos de sus generales del ejército, se negó a cumplir las órdenes dadas de represión.
Luego está la buena gestión de los petrodólares que durante todos estos años Chávez ha recibido de los altos precios del petróleo. El las elecciones sobre el referéndum de su presidencia, el presidente desembolsó entre 1.600 millones de dólares de los ingresos de la PVDSA en forma de beca de estudios temporales por más de 150 dólares mensuales a cientos de jóvenes y desempleados. Se trataba de becas para la educación, en su gran mayoría, pero que no llevaban obligación de estudiar. (sic)
Y así podría seguir y seguir, pero tampoco quiero acabar con esta entrada todas las virtudes que alrededor suya está conjugando ese presidente con tintes de dictador que intenta conjugar la devoción por la imagen tal cual Narciso clásico e ideas políticas muertas como las de Lenin.
El presidente de Venezuela también tiene cierta predilección por hacer largos discursos cuando puede sobre el imperialismo, las multinacionales, la globalización y etc. En la Cumbre de América Latina y la Unión Europea en mayo del 2004 celebrada en Guadalajara, México; mientras los presidentes, representantes y demás comitivas oficiales de los respectivos países se preocupaba por entablar reuniones con empresas, inversores, homólogos de otros estados para idear nuevas alianzas económicas; ¿saben a qué se dedico el revolucionario presidente venezolano? Pues “usó sus veinte minutos de tiempo en la cumbre para arremeter durante más de treinta y cinco minutos contra ustedes los ricos, señalando al ex-canciller alemán Schroeder, por ser los supuestamente responsables de la pobreza de América Latina.” Los funcionarios europeos pensaban que estaban viendo un fantasma de los años setenta y dejaron de prestar atención. Mientras las diplomacias de Estonia, Letonia, Lituania, Irlanda, Chile, Argentina, Mexico, Brasil, etc. se dedicaron a firmar acuerdos y convenios de inversión.
Sin embargo, estas actuaciones más llamativas de Hugo Chávez no son las más peligrosas. Son las llevadas a cabo en su propio país las que están levantando cierto tufillo ditactorial que algunos parece que niegan a ver. Repasemos algunas:
• en 2001 había hecho cambiar las leyes sobre la propiedad de las tierras, hidrocarburos y bancos.
• En 2002 había descabezado a la organización empresarial venezolana más importante, Fedecámara, y a al central obrera, la Confederación de Trabajadores de Venezuela, y a la compañía estatal independiente que controlaba la mayor parte del presupuesto nacional, el monopolio estatal PDVSA.
• En 2004 reformo la Corte Suprema de 20 a 32 miembros, llenándolo de partidarios y asegurándose el control total en una institución encargada de dictar la última palabra sobre la libertad de prensa y las reglas electorales. Este mismo año aprueba una ley que otorga poderes al gobierno para censurar de facto a la prensa.
Pero estas cosas no deben sorprendernos, Chávez ha dicho varias veces que quiere mantenerse en el poder hasta por lo menos el 2021, y que la democracia representativa es un sistema que “no sirve para ningún gobierno latinoamericano, porque la única cosa para la que ha servido es para dejar que una clase bastarda tome el poder y hunda al pueblo en la miseria.” (Amen)
Pero Hugo Chávez ha logrado también cosas nunca vistas, conseguir que sindicato y patronal se aliaran en una huelga para respaldar el paro nacional de los trabajadores de PVDSA, y la huelga general indefinida había logrado convocar una de las mayores manifestaciones de la historia del país. Pero por lo visto, al presidente no le debieron gustar los gritos a la puerta de su casa de Miraflores, y según confesaron algunos de sus generales del ejército, se negó a cumplir las órdenes dadas de represión.
Luego está la buena gestión de los petrodólares que durante todos estos años Chávez ha recibido de los altos precios del petróleo. El las elecciones sobre el referéndum de su presidencia, el presidente desembolsó entre 1.600 millones de dólares de los ingresos de la PVDSA en forma de beca de estudios temporales por más de 150 dólares mensuales a cientos de jóvenes y desempleados. Se trataba de becas para la educación, en su gran mayoría, pero que no llevaban obligación de estudiar. (sic)
Y así podría seguir y seguir, pero tampoco quiero acabar con esta entrada todas las virtudes que alrededor suya está conjugando ese presidente con tintes de dictador que intenta conjugar la devoción por la imagen tal cual Narciso clásico e ideas políticas muertas como las de Lenin.