2 de abril de 2008

Marx no puede

Marx no puede, simplemente no puede.

Puede que la interpretación de los textos no sea una disciplina fácil, de ahí quizás que no a todo el mundo se le de especialmente bien la hermenéutica o la filosofía analítica. Esa es la sensación que me dejó la lectura de un artículo publicado por Kantor titulado “Cuba y Marruecos en Club Lorem Ipsum, donde creo que el autor no se percata de la incapacidad de la teoría marxista para explicar cualquier progreso o desarrollo económico actual.

La lectura básica que sustenta su teoría parte de Karl Marx, defendiendo su elección o valided “siempre que le juzguemos por la magnitud de sus aciertos, e ignoremos la de sus errores” (sic), bajo esa condición tan laxa se puede salvar incluso a Hitler por como mejoró de forma increíble la condición económica de los alemanes después de la I Guerra Mundial, siempre y cuando obviemos sus errores. Sin embargo, el problema radica en que Kantor comete una serie de malas interpretaciones en la teoría marxista.

Menciona que Marx “identificó el progreso tecnológico como el motor de la Historia…”. Si leemos el Manifiesto Comunista (1848) encontramos:

“Toda la historia de la sociedad humana, hasta la actualidad, es una historia de la lucha de clases”

“Hasta hoy, toda la historia de la sociedad ha sido una constante sucesión de antagonismos de clase…”

Si analizamos lo que significa el progreso tecnológico para el marxismo nos encontramos que se trata de un desarrollo meramente cualitativo de las fuerzas productivas. Dicho desarrollo tecnológico está unido con la ley del valor – trabajo, base fundamental del sistema capitalista. Resumiendo muy mucho, el progreso tecnológico tiene como meta principal aumentar los beneficios del capital reduciendo los costes de utilización del capital e incluso, en los casos de suplantación de mano de obra, como fuente para la regulación salarial a la baja, aumentando así la plusvalía del burgués. Se trata de un fenómeno social, una forma innovadora en hacer las cosas o aplicar nuevas tecnologías, que como todo fenómeno social se encuentra supeditado a la súper-estructura económica.

El problema continúa a la hora de aplicar la teoría de clases marxista a los procesos de desarrollo capitalista, tanto los que ocurrieron en el pasado y llevaron a los actuales países ricos a su actual nivel, como los nuevos procesos que se están llevando a cabo en la actualidad en todo el mundo.

Defender o argumentar las causas del desarrollo económico capitalista en términos de materialismo histórico es cometer el mismo error que cometió Marx. Mejor dicho, aceptar el error de Marx es aceptar de forma consciente una teoría falsa, con todos los resultados negativos que ello produce. El problema radica en que Marx fue incapaz de explicar de forma convincente el paso que lleva a de una sociedad feudal a una sociedad capitalista, simplemente porque él sólo se centra en la lucha de clases, su antagonismo y la centralidad del materialismo histórico que de ello se deriva. Afirmar que el paso del Antiguo Régimen a la Sociedad Industrial es meramente un cambio en la posesión de los medios de producción es ignorar todos los desarrollos socioculturales de la historia: la aparición del protestantismo, el liberalismo, la ciencia como explicación frente a la religión, etc.

La aplicación de los postulados marxistas busca demostrar, y esa es la tesis central del trabajo de Kantor, que España debe centrar su atención no en China y la India como destino de sus inversiones, sino en Cuba y Marruecos (“el Magreb es nuestra China y LATAM nuestra India”). El resultado de esta tesis se basa principalmente en las oportunidades que se presentan en esos países frente a los países asiáticos debido a:

a) la mano de obra abundante y barata (ejercito de reserva)

b) la existencia de unas clases feudales en ambos países que desean un desarrollo capitalista en sus países

c) la influencia de España en esos países es lo suficientemente fuerte para promover los cambios necesarios

Kantor se olvida que:

a) la sociedad comunista cubana no es un sistema feudal, sino el desarrollo posterior que Marx esperaba de una sociedad capitalista, por lo tanto, no sería una evolución sino más bien una involución. Bajo los postulados de la teoría marxista, Cuba ha superado todos los males de la lucha de clases y su sociedad es perfecta.

b) Las teorías de Marx no pueden hacer una sociología correcta de las sociedades islámicas, porque es evidente que los estudios de Marx son principalmente occidentalistas. A todo ello, está más que claro que estas sociedades no tienen problemas debido a la posesión de los medios de producción material, sino que es el mundo político-religioso el que lo impregna todo.

Ello no invalida que sean Cuba y Marruecos los polos principales de inversión española, simplemente que Kantor no da las razones correctas para sostener dicha tesis. De hecho, debido al uso de esa perspectiva marxista se olvida de otras explicaciones que pueden aclarar el éxito de China e India:

a) China mantiene sus costes precisamente por tratarse de una sociedad comunista donde los salarios de los trabajadores no son dados por el libre juego del mercado, sino impuestos por el Estado. Si Cuba va a dejar el comunismo, ¿qué ventajas puede reportar sobre el país asiático? ¿No sería mejor que siguiese siendo comunista?

b) La India es el back office del mundo porque tiene una ventaja competitiva respecto a los países elegidos por Kantor: se trata de un país angloparlante. La descentralización y subcontratación de los procesos operativos de menor valor se trasladan allí porque el inglés es idioma oficial y para la gran mayoría de la población es su lengua materna.

c) Los costes de apertura de nuevos mercados en China e India son mucho menores que en Marruecos y Cuba, donde harían falta inversiones millonarias en infraestructuras, que si bien incluso en los países del continente asiático son aún tercermundistas, el desarrollo en los países seleccionados por Kantor son aún menores. Recordemos que no hace mucho en Cuba no podía tenerse nevera y por ejemplo en India, el acceso a Internet es impresionante.

2 comentarios:

Javi (@Treintanyero) dijo...

Muy buen análisis.

Marx ha hecho mucho daño al método científico...

Saludos liberales

Javi

Anónimo dijo...

Tanto como que Marx fixo moito dano o método científico... Non sei paréceme un tanto fora de lugar. De tódolos xeitos podo chegar a entender dita postura, pero non esquenzamos o que significou Marx no seu momento, e no que hoxe aloumiña.

Paréceme ben que se faga crítica, e mellor inda se é constructiva (como é esta) Pero caer en prexuizos por ser anticomunista ou antiroxo,..., simplemente me parece demagoxia barata (resposta ó comentario de JaBier).

Alberto bo análise, unha aperta!!

E saudos libertinos!!! ;)